Mensajes clave
Introducción
Los factores estructurales que influyen en la reintegración están relacionados con las condiciones políticas, económicas y sociales de carácter local, nacional e internacional. Estos factores determinan el modo en que se deben elaborar las estrategias de reintegración sostenible y el tipo de asociaciones que se deben movilizar para prestar apoyo a las personas que retornan y sus comunidades. La existencia de mecanismos de coordinación eficaces y de políticas y estrategias orientadas a las personas que retornan, así como la capacidad y la participación de los agentes pertinentes en los países de origen y acogida, son todas condiciones que influyen en la capacidad de una persona que retorna de reintegrarse satisfactoriamente.
La cantidad y el alcance de las intervenciones estructurales de un programa de reintegración dependen de las capacidades existentes en el país de origen y las necesidades de las personas que retornan y sus comunidades. Cuando los retornos o las necesidades de las personas que retornan son limitados o cuando existen servicios sociales consolidados, las intervenciones estructurales pueden centrarse en la realización de derivaciones a estructuras existentes.
Sin embargo, en los países de origen en que las capacidades e infraestructuras no son suficientes para ofrecer a las personas que retornan y la población local el nivel de servicios necesario para una reintegración sostenible, quizás sea preciso prestar apoyo normativo, técnico y material (a instituciones públicas, al sector privado y a la sociedad civil). La capacidad estructural existente y las necesidades de las personas que retornan y sus comunidades pueden determinarse durante las evaluaciones iniciales del contexto, la persona y la comunidad (consulte las secciones 1.4.2, 2.2 y 3.2).
Este módulo proporciona orientación para fortalecer los sistemas locales, nacionales e internacionales de cooperación, gobernanza, coordinación y provisión de servicios que fundamentan la prestación de asistencia para la reintegración. Abarca la colaboración estratégica, el fortalecimiento de la capacidad y la asunción de responsabilidades de los agentes pertinentes; la elaboración y el fortalecimiento de los marcos de coordinación; el establecimiento o la identificación de modelos eficaces de cooperación internacional; y el fortalecimiento de los marcos y estrategias normativos para favorecer una reintegración sostenible.